Aún creciendo en el mercado portugués, los hogares se distinguen cada vez más por su propuesta de automatizar las actividades domésticas. Con la ayuda de dispositivos conectados a Wi-Fi, como Smart TV, asistentes de voz, lámparas y enchufes inteligentes, los residentes pueden controlar fácilmente remotamente, o por comando de voz, acciones que van desde encender una lámpara hasta abrir la puerta de entrada.



“La unión de componentes de tecnología, automatización, inteligencia digital y sustentabilidad estará cada vez más presente tanto en entornos industriales como residenciales”.



1. Elige un asistente de voz

Los asistentes de voz, como Alexa, Siri o Google Home, son una de las piezas fundamentales para aquellos que quieren un hogar inteligente. Se pueden distribuir estratégicamente por todo el inmueble para, mediante comandos, realizar funciones como encender dispositivos, reproducir música, controlar lámparas y enchufes y realizar llamadas.



2. Tener una buena conexión a Internet

Para que todos los componentes funcionen a la perfección, se requiere una red Wi-Fi potente y estable. Además de Internet de alta velocidad, un enrutador de largo alcance es imprescindible.



3. Compatibilidad entre dispositivos

Un factor importante a considerar en la composición de un sistema inteligente es la compatibilidad entre los dispositivos. El equipo conectado debe ser compatible con el asistente de voz y la aplicación gestora elegida, así como con la generación de la tecnología de red existente en la vivienda, ya sea móvil (4G o 5G) o Wi-Fi (Wi-Fi 5 o 6). ).



Estos son solo algunos consejos, pero son solo para empezar. En nuestro BLOG te explicamos mucho más sobre Smart Homes, y si tienes alguna duda, contacta con nosotros y uno de nuestros especialistas te ayudará a encontrar la mejor solución para ti.

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